Cesar Castellanos y sus sentimientos

Extractado de la conferencia Entendiendo el proposito de Dios para el matrimonio, por Cesar Castellanos 

Crea en el propósito de Dios para su matrimonio, Dios tiene un propósito con cada individuo, cuando yo no conocía al Señor, lógico yo estaba alejado del propósito de Dios pero el mismo día que me convertí, yo sabía que era llamado a predicar el evangelio, vino una convicción en mi espíritu, aunque yo no conocía ninguna otra iglesia fuera de la iglesia católica pero yo sabia en mi corazón que era llamado a predicar el evangelio, desde ahí empecé a orar por mi compañera porque el propósito de Dios se complementa con el cónyuge, de ahí que el proverbista habla de que el que halla esposa, y ese hallar esposa no es que uno halla salido por el mundo a buscar cual era la más hermosa entre todas para escogerla, no, si no hallamos la esposa no porque nosotros la buscamos, yo puedo decir que Dios la buscó por nosotros y nos la trajo, porque El es el que busca el cónyuge de cada uno de nosotros, cuando Dios da, Dios no se equivoca, cuando uno escoge, uno si se equivoca, cuando yo conocía  Claudia, inmediatamente la vi, el Señor me habló y me dijo ella va a ser tu esposa, yo no llegue ahí mismo a decirle oye El Señor me habló tu vas a ser mi esposa, sino que empecé a orar, hice un ayuno de 3 días, incluso llegué a reprender ese sentimiento, pensando que venía del enemigo, pero el Señor me dijo: No reprendas porque ese sentimiento viene de mi. Entonces empecé a esperar el tiempo de Dios porque Dios es un Dios de tiempos sino que en el tiempo de El, la trajo a mi, lógico ahí viene la ayudadita que uno le da a Dios, porque algunos son tan tímidos que no le dicen nada a la mujer y por eso dejan pasar las oportunidades, pero yo dije esta oportunidad no la voy a dejar pasar por nada, porque siempre Dios da lo mejor, El no se equivoca, yo tuve experiencias de una joven que le profetizaron, y me dijeron ella va a ser tu esposa, si yo hubiese aceptado esta mujer, y me hubiese casado con ella, el rumbo de mi vida hubiese completamente diferente y me habría salido del propósito de Dios, ustedes como creyentes posiblemente tendrán que afrontar situaciones de profecías de matrimonios y yo quiero decirles que en la parte sentimental, eso es algo muy privado que va entre Dios y las personas, yo como padre, respeto las decisiones de mis hijas porque no es que el hombre le escoja el marido a las hijas, sino es Dios el que escoge, porque así uno escoge se equivoca pero si Dios escoge El no se equivoca y yo se que muchos de ustedes ya están entrando en una etapa donde sus hijos muchos de sus hijos ya están creciendo y a veces uno hace muchos ideales  en su mente, y como que sueña uno por los hijos y uno dice yo quiero que mi hijo se case con alguien que sea así, así y asa. Dejemos que Dios sea el que escoja.
Cuando me case con Claudia ella solo contaba con 17 años de edad,  ella pudo haberme dicho: "Fui muy inmadura cuando me case contigo"  pero no ha sido así, sabía muy bien lo que estaba haciendo y gracias a Dios nuestra relación ha sido muy estable en estos años,  hemos gozado de una perfecta armonía,  la presencia de Cristo está en cada acto que nosotros realizamos,  hay comunicación,  hay dialogo, hay amor.

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